¿Qué es lo que puede ir mal en Medio Oriente?: Page 3 of 3
como al final pasó en la última guerra de Iraq.
El resultado más factible de tanta matanza, sea cual sea la suerte del Estado Islámico, es el empeoramiento del caos ya existente en Iraq, Siria y otros países de la región, incluyendo posiblemente Turquía. Tal como observó Andrew Bacevich, “Aun si ganamos, perdemos”. La pérdida de control de los costos reales de esta guerra pedirán una respuesta para esta pregunta: ¿Controló Estados Unidos alguna vez la situación?
En septiembre, Siria se convirtió en el decimocuarto país del mundo islámico –desde 1980– en ser invadido, ocupado o bombardeado por Estados Unidos. Durante todos estos años de guerras estadounidenses, los objetivos han cambiado sin cesar; mientras tanto, la situación del Gran Medio Oriente no ha parado de empeorar. ¿Construcción de democracias? Ya no se volverá a hablar mucho de esta cuestión. ¿Petróleo? Estados Unidos está empeñado en convertirse en un exportador neto. ¿Acabar con el terrorismo? Esta es hoy la excusa más habitual, pero la evidencia nos muestra ya que tantas luchas en la región solo alientan tanto el terror como el terrorismo. Dentro de casa, el discurso de los que infunden el temor crece en intensidad y nos conduce a un estado de seguridad nacional cada día más omnipresente y al aumento de las justificaciones para un mayor control social.
El peor escenario: La guerra estadounidense en la totalidad de Medio Oriente transita su tercera década sin un final a la vista, un torbellino que arrastra vidas, recursos económicos y mentales de Washington, mientras son ignoradas otras importantes cuestiones. ¿Qué sería posible que vaya mal con esto?