China presta tres mil 500 MDD a Petrobras
El China Development Bank (CDB), uno de los dos bancos de desarrollo chinos, y la estatal brasileña Petrobras anunciaron hoy un acuerdo para abrir una línea de crédito de tres mil 500 millones de dólares para la compañía petrolera.
En un escueto comunicado en el que no especifica los detalles del acuerdo, Petrobras informó que "las partes confirman la intención de desarrollar nuevas cooperaciones en el futuro".
El CDB, banco de desarrollo chino cuyas decisiones son controladas por el Consejo de Estado chino, lleva una década invirtiendo en el mundo en desarrollo y prestando decenas de miles de millones a países de Asia, África y América Latina a fin de permitir el acceso de China a materias primas.
El crédito concedido a Petrobras -cuyo anuncio impulsó las acciones de la compañía por encima del seis por ciento en la bolsa de Sao Paulo este miércoles- supone un balón de oxígeno para la mayor compañía de Brasil, que se encuentra en una compleja situación por los escándalos de corrupción.
La empresa, cuyas actividades suponen -según los analistas- en torno al cinco por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de Brasil, ya había recurrido al CDB para su financiación en 2009, cuando cerró un crédito de 10 mil millones de dólares a devolver en una década.
Las denuncias de corrupción y desvío de dinero, que acarrearon la apertura de procesos judiciales en Estados Unidos por parte de inversores, unido a altas deudas de la petrolera, provocaron un retroceso de la confianza de inversionistas en Petrobras, por lo que enfrenta ahora mayor dificultad para financiarse en el mercado.
En febrero, la agencia de calificación Moody's rebajó la nota de la petrolera y la situó en el grado de inversión especulativo.
La Operación Lava Jato (Operación Limpieza, en portugués), el mayor escándalo de corrupción de la historia de Brasil, según el fiscal general del país, dañó seriamente la credibilidad de Petrobras, que aún no presentó su balance para el año 2014.
Cientos o incluso miles de millones de dólares habrían salido de forma ilícita desde la estatal Petrobras para funcionarios, políticos y formaciones como el propio Partido de los Trabajadores (PT) de la presidenta Dilma Rousseff, por medio de sobrefacturación de contratos de suministro.
Ese desvío se llevaría a cabo por medio de sobrefacturación de contratos y del pago de comisiones que llegarían al tres por ciento de los contratos firmados por la petrolera con suministradores de bienes y servicios.